viernes, 13 de noviembre de 2009

Mia de nuevo volvió

No se que me pasa, mi autoestima estaba tan bien, me sentía bien conmigo mismo, con la familia, la universidad me daba un nuevo panorama, una vida nueva comenzaba y creía que nacerían nuevas amistades, si así es mis amigos de la preparatoria nunca me quisieron, eso lo se y lo sabré.

Esperaba encontrar amigos de verdad en la facultad, lo hice, hace como tres semanas me enoje con ellos, la verdad me trataban mal, se sentía algo pesado el ambiente con ellos y me dije a mi mismo, de nuevo lo has hecho Isaac, nunca podrás sostener una amistad y estas mas solo que nadie en este miserable planeta, desde entonces empecé a comer un poco más, estaba comiendo saludable pero estas semanas le entre mas duro a la comida, ayer me levante y dije pero que me está pasando, yo no soy así.

Si me enojo conmigo o con los demás simplemente dejo de comer y ahora estaba pasando lo contrario, así que me desperté hoy y dije; "haré un gran ayuno, después de todo lo que he tragado estos días", desperté y aguante muy bien pero tuve que tomar leche con cereal.

Si el típico cereal y leche con el que muchos desayunan, afortunadamente yo voy en el turno vespertino a clases y mis padres trabajan y mi hermano va en la mañana a la escuela así que implore a Mia que me ayudara por no haberle cumplido a Ana.

Ahora me duele la garganta, casi nunca he recurrido a Mia y esto me asusta, ahora que estoy tan solo podría destruirme otra vez.

A mi casa me hago 1 hora 30 minutos a la facultad, un chico vive por mi casa y nos venimos juntos del colegio, creo que es una buena persona le conté que había estado medio deprimido y me aconsejo que saliéramos hoy en la noche, mis padres son sobre-protectores y no me dejaron, también he empezado a hablarle a una chica Samantha es una gran chica creo que también podremos ser grandes amigos, tenemos muchas cosas en común, aunque a veces siento que me trata mal también, no se que pasa conmigo, quizá me tomo las cosas muy apecho.

Espero no arruinar estas amistades.........

Maldita soledad, si hubiera un interruptor que me quitara la vida sin sufrimiento ya lo habría usado.